Camino de Magaz esta mañana |
Robo el titular a la surrealista y genial película del
mismo nombre dirigida por José Luis Cuerda y que él recogió del acervo de
frases populares españolas. Y es que, habiendo soportado el día de ayer, anunciar “amanece que no es poco” no
es una perogrullada, casi más bien es un alivio.
Después de la aciaga jornada del domingo a causa de los
incendios, el lunes mostraba los primeros ecos del horror vivido envolviéndonos
en una inmensa nube de humo. Era tal la intensidad que impedía el paso de los
rayos de sol hasta tal punto que muchos animales continuaban en sus cobijos
esperando el nuevo día. Pasaban los
minutos, incluso las horas, y no amanecía. Parecía como si la Tierra hubiese
dejado de girar y el Bierzo hubiese quedado en la zona de tinieblas: el
apocalipsis.
Hoy nos ha venido Dios a ver con esta ligera lluvia que, a
pesar de significar poco para paliar la sequía, al menos ha limpiado la
atmósfera y nos permite respirar un aire más limpio.
Estamos viendo las orejas al lobo, pero nos cuesta aprender.
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