Soy el hijo de Víctor Prieto, tanto en nombre de su familia como en el mío propio queremos agradeceros vuestra compañía en estos duros momentos, así como a quienes le habéis tenido en vuestro pensamiento. También a carlos por la publicación.
La foto transmite muy bien a Víctor; de sólida formación humanística, su vida laboral trascurrió en Asturias. En la enseñanza pública fue todo: Profesor de Geografía e Historia, administrador, jefe de estudios y subdirector del IES nº 1 de Gijón, además de director de la Escuela Regional de Hostelería y NN.PP. Turísticas de Asturias. He constatado que decenas, y presiento que centenares, de compañeros no hemos podido rendirle debido homenaje, por el rápido e inesperado fallecimiento que nos ha encontrado lejos o trabajando y sin capacidad de reacción. Nuestro más sentido pesar a su familia y a los vecinos de su amado Cacabelos; seguiremos hablando de él en presente, pues difícilmente nos haremos a su ausencia.
Pocas cosas le quedan a uno grabadas en la memoria como la sonrisa que lucías siempre, compañero Víctor. Es difícil decir adiós al que adivinas dentro. Gracias por tu compañía en la docencia, gracias por tu cercanía en la tarea y gracias por el apoyo, fuerza y serenidad que transmitías a aquellos que tuvimos la suerte de compartir horas de desvelos contigo.
Soy el hijo de Víctor Prieto, tanto en nombre de su familia como en el mío propio queremos agradeceros vuestra compañía en estos duros momentos, así como a quienes le habéis tenido en vuestro pensamiento.
ResponderEliminarTambién a carlos por la publicación.
La foto transmite muy bien a Víctor; de sólida formación humanística, su vida laboral trascurrió en Asturias. En la enseñanza pública fue todo: Profesor de Geografía e Historia, administrador, jefe de estudios y subdirector del IES nº 1 de Gijón, además de director de la Escuela Regional de Hostelería y NN.PP. Turísticas de Asturias. He constatado que decenas, y presiento que centenares, de compañeros no hemos podido rendirle debido homenaje, por el rápido e inesperado fallecimiento que nos ha encontrado lejos o trabajando y sin capacidad de reacción. Nuestro más sentido pesar a su familia y a los vecinos de su amado Cacabelos; seguiremos hablando de él en presente, pues difícilmente nos haremos a su ausencia.
ResponderEliminarPocas cosas le quedan a uno grabadas en la memoria como la sonrisa que lucías siempre, compañero Víctor. Es difícil decir adiós al que adivinas dentro. Gracias por tu compañía en la docencia, gracias por tu cercanía en la tarea y gracias por el apoyo, fuerza y serenidad que transmitías a aquellos que tuvimos la suerte de compartir horas de desvelos contigo.
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