sábado, 2 de febrero de 2013

Multitudinaria participación en la Bendición de los Panes




Un año más, y como manda la tradición religiosa, los cacabelenses acudieron en gran número a la ceremonia de la Bendición de los Panes coincidiendo con la fiesta de La Candelaria.
Si siempre ha contado esta celebración con la presencia de muchos fieles que abarrotan el Santuario y las inmediaciones, este año el número de participantes ha sido mucho mayor. Al coincidir la Virgen de la Candelaria en sábado han sido muchos los cacabelenses “del exterior” que han aprovechado para acercarse a la villa y asistir a la bendición.
Andrés, un clásico de las Candelas

Avelina nunca se rinde

Tiempo antes del inicio del acto religioso era imposible acceder al interior del templo por estar ya repleto de fieles esperando ansiosos el momento de la bendición. Una gran parte de los asistentes debió permanecer en el exterior a la espera del sacerdote para recibir el agua bendita en sus cestas y bolsas llenas de los típicos panecillos en forma de trenzas, cuernos, palomas o roscas.
La presentación de año en  año va mejorando y recuperando los medios tradicionales. Cada vez se nota más la ausencia de las bolsas de plástico que hasta hace unos años habían ido ganando terreno. Ya vuelve a ser normal, después del ruego de don Jesús en las últimas ediciones, portar los panes en cestillas de mimbre ricamente adornadas con encajes o en las bolsas de tela usadas anteriormente.


Muchos de los panes benditos esta tarde viajarán en las próximas fechas a diferentes lugares de la geografía española enviados por los cacabelenses a sus familiares. Otros se guardarán celosamente durante el año para ser consumidos a causa de alguna enfermedad, bien de personas o bien de animales domésticos. Del resto, acompañados de chocolate o embutidos,  estarán dando buena cuenta esta tarde y noche nuestros vecinos.
Héctor recibiendo el agua bendita para sus panes
Cada uno elige su modelo: bolsa o cesta
Hay muchas formas de llevar el pan


























Silvia y su chico recuerdan con nostalgia a tres peques que esta año están en tierras gallegas: David, Mónica y Martín. ¡Va por ellos!

2 comentarios :

  1. MUCHAS GRACIAS CARLOS UNA FOTO PRECIOSA ESPERO QUE DESDE FERROL NOS VEAN.SEGURO QUE HAY MUCHOS MAS QUE LOS HECHAN DE MENOS

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  2. Estoy esperando un pan de esos. Que se den prisa los Sres de Correos

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