Cuando aún no se han cumplido dos
meses del fallecimiento de su mujer Mª Luz, Quico “El Curioso” ha muerto esta
mañana. “El Curioso”, apodo familiar con el que todos le conocíamos, era ya el último fotógrafo de Cacabelos a la vieja
usanza. Lo mismo fotografiaba una boda, un bautizo o un cadáver si se lo solicitaban. Recorría las
fiestas de la comarca para retratar a
mozos y mozas, en grupos o individualmente. La fachada de su vivienda muchas
veces sirvió de soporte a la sábana blanca de fondo para las fotografías del
carné de identidad. Muchos disfraces de carnaval quedaron plasmados gracias a su labor
profesional. Por su estudio pasaban las novias para realizar el retrato que
deseaban mandar al enamorado. No fueron pocos los que, estando en periodo del
servio militar, posaron marcialmente con sus uniformes ante Quico.En fin, niños, niñas, jóvenes, adultos y ancianos; en bodas, bautizos, procesiones o fiestas, todos posamos algún día de modelos ante sus cámaras.
D.E.P.
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