sábado, 23 de mayo de 2015

Horacio Guerra, un personaje de (del) cine II



Segunda parte


La conversación con Horacio es muy amena. Como hombre de mundo, ha vivido mucho,  es buen conversador. Salpica continuamente  los recuerdos con anécdotas y enlaza un tema con otro sin freno.
Volviendo de nuevo la vista atrás, le comento la admiración que causó en Cacabelos cuando se presentó conduciendo un espectacular deportivo biplaza. Apenas había turismos particulares en el pueblo y los deportivos eran cosa de película o del NODO:

-Era un Pegaso, fabricado en España. Fíjate, que vino de EEUU. Fue uno de los 26 fabricados. Llegó procedente de una subasta y pertenecía al empresario Juan Soto. Supe por el chófer de la familia que su mujer quería que se deshiciese del coche porque temía que se matase su marido con él. No fue caro, mi padre me ayudó a pagarlo. Yo colaboré con lo que saqué al vender el mio.
El cine sigue asomándose a la conversación:
-Mi primera película como productor fue La noche y el alba de José Mª Forqué. Te contaré el susto que pasamos rodando en Villaverde (Madrid) con Maruchi Soto, Antonio Vidal y Paco Rabal: hacía un frío tremendo y para no helarnos preparé una hoguera con unas tablas que había por allí. Me di la vuelta y anduve unos pasos cuando una explosión me tiró al suelo, había detonado una bomba de la Guerra Civil que había allí enterrada. Me salvé de milagro.
-Trabajé mucho con un personaje de Valtuille de Arriba, Gerardo  Marote Alba “Novo”(1). Juntos en la producción hicimos El Señor de la Salle, la mayor producción del cine español en aquella época. La dirigió Luis César Amadori y fue interpretada por el americano Mel Ferrer.

Conocí durante el rodaje a Andrey Hepburn que era entonces su mujer. Fue en la Casa de Campo de Madrid. Cuando me la presentaron me quedé sin poder hablar fascinado por su belleza.
Antonio Banderas, Penelopé Cruz, Javier Bardem, Elsa Pataky…actores y artistas españoles que buscan sobresalir en la Meca del Cine: Hollywood. Horacio ya lo intentó hace unas décadas estableciéndose durante un tiempo aquella localidad californiana.
- Contacté allí con Welch, el marido de Raquel Welch que era canario. Ella se llamaba Raquel Tejada, se puso su apellido.  Me prestó un apartamento y comencé a moverme por allí. Contacté con Sergio Leone, que ya conocía de España, y me fui con él para hacer Por un puñado de dólares. Yo le venía muy bien porque parte la rodábamos en España y necesitaba mis contactos.
Pasan tres años y Horacio se va a Méjico:
-Julio Vallejo me lleva de segundo ayudante de producción a Méjico donde se va a rodar El ídolo de Acapulco con Elvis Presley y el argentino Alejandro Rey.

-Elvis Presley fue, y sigue siéndolo, un icono de la música rock ¿Cómo lo recuerdas durante el rodaje?
-Era muy introvertido, cuando no estaba ante las cámaras se pasaba el tiempo solo en su camerino o en la caravana cuando hacíamos exteriores. Estaba como ensimismado. Con quien hice buena amistad fue con Alejandro Rey que era el segundo marido de Mabel Car, la primera mujer de Fernando Rey.
-Vaya lío. En España participa como productor ejecutivo en El padrino y sus ahijadas y Montecarlo. Surge también la llamada de la radio y trabaja como locutor en programas deportivos bajo la batuta de Ricardo Suárez, eran tiempos en los que dirigía Televisión Española el que luego sería Presidente del Gobierno, Adolfo Suárez.
-Coincidí  entonces con el famoso realizador Ramón Díaz que me llevó como colaborador al programa 300 millones que se emitía para España y América. Una buena parte era musical…
Programas, actores, cantantes…van surgiendo. Se suman sus experiencias como introductor del horóscopo chino en nuestro país en los primeros años ochenta del siglo XX, sus negocios, sus viajes, sus divorcios…
A pesar de haber regresado a España para descansar y prepararse para una operación, Horacio no deja de maquinar e idear nuevos negocios. Y como quien no quiere la cosa y por aquello de matar el gusanillo, está presentando una línea de joyas elaboradas con parte de las perlas naturales –Isla
Una de las cruces de Horacio, no hay dos iguales
Margarita
, me recuerda, es la isla mundial de la perlas, en griego margarites=perla- . Son cruces, rosarios, pendientes…que, piensa, tendrán buena acogida en el mercado (658014493). También anda enredando en otro proyecto comercial unido alos escudos heráldicos familiares. En fin, que los años no pasan por él, seguimos teniendo a un Horacio Guerra en estado puro.
(1) Gerardo Marote Alba, natural de Valtuille de Arriba, hijo de Francisco y Eumenia, reside actualmente en Costa Rica, según datos facilitados por una sabrina suya.

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