domingo, 20 de abril de 2014

Pregón Pascua 2014 de Ricardo García



Pregón Pascua 2014, 19 de abril 2014
Ricardo García

Buenas noches Cacabelos,
Es para mí un honor y un privilegio pronunciar el Pregón de las Fiestas de la Pascua 2014. Por ello lo primero  es mostrar mi agradecimiento al Alcalde, Adolfo Canedo y al resto de la corporación municipal por concederme el privilegio de efectuar  la lectura del Pregón. Decía que es un honor pues no existe nada en mi trayectoria profesional que pueda acreditar mi capacidad para  escribir y dar lectura al Pregón que unas Fiestas como la de la Pascua se merecen.  
Como vecino que he sido y que soy, aunque ya sólo sea  a tiempo parcial, creo que lo más apropiado en esta noche es compartir con vosotros los recuerdos más vivos que tengo sobre las fiestas de la  Pascua.  Serán recuerdos personales y por lo tanto limitados y selectivos.
Lectura del Pregón Pascua 2014 en el palco de la fiesta


He vivido muchas fiestas, he contado alrededor de 40. Las he vivido en diferentes etapas, como niño, como adolescente, como joven, como padre y en esta noche como pregonero. Hubo un año, 1977, en el que fui miembro de la comisión de fiestas. Ese año la  fiesta fue organizada por  los alumnos del último curso del Instituto. 
La Fiesta de la Pascua tiene varios elementos que se conservan a lo largo de los años. Son los elementos que convierten a esta Fiesta en única y memorable: La música, las atracciones de feria, las actividades deportivas, los fuegos artificiales y la procesión de la Virgen.  Además habría que incluir a un elemento que es fundamental para nuestra percepción de la fiesta. La oportunidad que ofrece para reunirse con familiares, amigos o conocidos. Existe otro elemento que nunca  se incluye en el programa pero que siempre inquieta a los organizadores, los vecinos o los feriantes, me refiero al tiempo meteorológico. Abril es un mes lleno de promesas y sorpresas. Los días se hacen más largos, el  buen tiempo ha hecho su aparición pero también suele  llover. Y ese es el patrón meteorológico de las fiestas de Cacabelos.
Antes de que el Cambio Climático sea una realidad urgente que habremos de afrontar, recuerdo que los inviernos en Cacabelos resultaban largos, húmedos y fríos. Recuerdo que hacia finales de enero había una o dos semanas donde la niebla se adueñaba del valle del Cúa y la vida cotidiana se hacía más incómoda. Entonces, los recursos de ocio eran mucho menos abundantes que ahora. Creo que todos, pero en particular mis amigos y yo anhelábamos que llegase abril y la fiesta de la Pascua.
Ricardo estuvo acompañado en el palco por sus hijos
Los recuerdos más antiguos que conservo son para las atracciones de feria, en particular, los coches de choque. En esa época se situaban frente al cine Faba, donde ahora está situado el parque infantil.  Allí, ante mi insistencia, me llevaban mi padre o alguno de mis familiares. 
Los fuegos artificiales que durante 30 minutos  iluminan la noche del domingo son a la vez un recuerdo antiguo y actual.  Los fuegos artificiales son uno de los elementos más singulares de estas fiestas. El entorno que posibilitan las márgenes del rio y el puente, la combinación de fuegos acuáticos y terrestres junto con el reflejo de la luz en el agua agrandan la espectacularidad y la magia que de por sí tienes los fuegos artificiales. La sorpresa y emoción que manifiestan las personas que se agolpan en el puente y en las márgenes del rio para contemplar los diseños que han preparado los pirotécnicos es contagiosa. El retumbar de las bombas, los destellos, los reflejos en el agua, el olor a pólvora, el bullicio y las exclamaciones de asombro del público son señas de identidad de la noche del domingo de Pascua en Cacabelos.
Cacabelos ha sido un pueblo pionero en introducir pruebas deportivas en el programa de sus fiestas. Recuerdo la prueba ciclista que se celebraba a  principios de los años 70 y tenía cierta importancia en el calendario ciclista nacional. Se celebraba en un circuito urbano que salía de esta misma plaza,  subía hasta la ermita de San Roque para bajar por la calle Santa María y de nuevo a la plaza. Aproximadamente 1 km. Los ciclistas completaban varias vueltas, y  en cada vuelta el último corredor era eliminado. El paso de los ciclistas tan rápidos y tan cerca de los espectadores resultaba espectacular. La competición era emocionante y atractiva pero el circuito con calles estrellas y varias curvas cerradas era peligroso tanto para los ciclistas como para los espectadores más intrépidos o descuidados.   La prueba cambio de formato y pasó a disputarse por las carreteras de la zona. El cambio  de formato redujo  la espectacularidad y, por esa u otras razones la prueba dejo de celebrarse.
Fue Prada en 1973- si recuerdo bien- quién organizó la primera carrera de atletismo  en Cacabelos. Fue una carrera para chicos y chicas de 12 a 16 años donde teníamos que completar tres vueltas a un circuito que iba desde la Plaza hasta el Mercado Abastos para volver por la calle Santa María y de nuevo a la Plaza.   La iniciativa prendió y variaciones de ese circuito se repitieron en otras fiestas. Más tarde  de la mano de Chus Alonso la prueba se trasformó en una media maratón con un recorrido suave y hermoso que transcurría entre Quilós y Cacabelos.  Últimamente,  la distancia de la prueba se ha reducido a 10 km y se combina con carreras para niños.
También en aquellos  años bajo el empuje de Santos Uría y José Luis Prada se celebraron las primeras pruebas que hubo en la comarca en dos deportes minoritarios y de alguna manera inverosímiles para una población pequeña y en un entorno rural como Cacabelos. Me refiero a  la halterofilia y a el piragüismo. Las piraguas llenaron de color el río y las pruebas de halterofilia que se celebraba en la plaza siempre despertaron una gran curiosidad. Gracias al empuje de sus promotores los jóvenes y adolescentes tuvimos más oportunidades para   canalizar y orientar  nuestras energías e ilusiones. Que Cacabelos tuviese un club de piragüismo podría parecer razonable. El río Cúa tiene un caudal  abundante durante todo el año. Sin embargo, es un rio poco adaptado para la práctica del piragüismo. En invierno la navegación o es imposible o es peligrosa. En verano la distancia navegable es pequeña y compite con el espacio para los bañistas. Que aquí hubiese surgido un club de halterofilia y se crease una escuela que diese deportistas de talla nacional e internacional es mucho más difícil de entender y de explicar. Para mí  lo más destacable de estos dos ejemplos es apreciar como  el liderazgo, la acción y la pasión de unas pocas personas   resultan  decisivas para transformar el potencial de un pueblo y ofrecer nuevas oportunidades a los jóvenes de una comarca.
La música está o ha estado representada en el Pascua de varias formas. Se han celebrado  conciertos de rock, exhibiciones de grupos de gaitas,  bandas de música, coros y por supuesto la música de las orquestas. Me vienen a la memoria los conciertos que la banda de música ofrecía la mañana del domingo en la Plaza. La sonoridad de las flautas,  clarinetes o tambores tocando un pasodoble ha sido siempre electrizante.
El Alcalde obsequió a Ricardo con la réplica del Vendimiador
Los concursos de música televisivos tipo Operación Triunfo son en la actualidad muy populares. A mediados de los 70 y durante un par de años la Pascua acogió un concurso de música en directo. Había dos rondas. En la primera cada grupo disponía de 3 o 4 minutos para interpretar la canción. Un jurado emitía la puntuación y los 10 mejores  pasaban a la segunda fase. Cada espectador tenía sus favoritos y había intérpretes que venían acompañados de su grupo de fans. El jurado tenía que hacer gran esfuerzos para no dejarse llevar por los deseos del público. El concurso resultaba animado y entretenido y, en esencia similar a los que se realizan ahora en televisión.
Pero son las orquestas las principales encargadas de llenar de música la Fiesta. Los años 70  y primeros 80 fueron la época dorada para las grandes orquestas de verbenas. Recuerdo a Los Satélites o a la Orquesta  Compostela como dos de las orquestas con más prestigio. Ciertamente, la presencia de una de ellas en el programa reflejaba que ese año tendríamos una fiesta para recordar. Entonces, las grandes orquestas concitaban la presencia de muchos vecinos y personas  de la comarca. Pero por aquella época a la música en vivo que traían  las grandes orquestas les surgieron competidores, en especial entre los jóvenes. Las discotecas hicieron su aparición, y entre ellas,  la mítica discoteca Faustín que modifico los hábitos de los jóvenes de Cacabelos.  Casi todas las discotecas de entonces han  desaparecido pero su influencia sobre la manera de apreciar la música parece duradero.  No es una buena señal que la presencia de gente joven en las verbenas sea baja, esto resta vitalidad y encanto a las mismas.
El sentido religioso de la fiesta se expresa y se concentra durante la misa y la procesión del lunes. Tanto si hace buen tiempo como si no, acceder al interior del templo está reservado para los más devotos, pues exige llegar con bastante antelación. La solemnidad de la ocasión alcanza su mayor esplendor cuando la Virgen es levantada y paseada alrededor del templo. La traca final que precede a la entrada de la Virgen en la iglesia es atronadora y emocionante. Es uno de esos actos que invariablemente erizan los pelos de la piel.
Si al principio invocaba a los coches de choque, al final como en todas las historias cíclicas y esta fiesta lo es, vuelvo a las atracciones de feria, los coches de choque y los hinchables. Ahora yo no soy quién lleva la iniciativa para visitar las atracciones. Mis hijos me empujan. Justo es que sea así, pues aunque la fiesta es de todos y para todos, son los más jóvenes los que tendrán  la responsabilidad de conducir la Fiesta de la Pascua hacia al futuro, pero antes de que eso llegue, quiero invitaros y animaros a que disfrutéis del presente y de lo que la Pascua de 2014 puede ofrecer.

VIVA LA PASCUA !
VIVA CACABELOS !

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