DON ZENÓN O EL PLACER DE UNA MESA BIEN ABASTECIDA
Antonio-Esteban
González
Talmente, el epígrafe que abre hoy esta sección parece el
título de un libro de Gastronomía del siglo XVIII: "DON ZENÓN o EL PLACER
DE UNA MESA ABUNDANTE", pero no lo es. Es, sencillamente un título que se
me ocurrió, al azar, porque, a mí, a veces, aunque no lo parezca, se me ocurren
títulos así. Además, don Zenón era Luís Ameijide Aguiar, un político del
Régimen anterior, nacido en Lugo, en mil novecientos once y perteneciente a la
carrera de "altos estudios mercantiles" -que no sé muy bien qué tipo de carrera
es- y que lo llevó a dirigir el
Banco de La Coruña, en Lugo, que fue
posteriormente absorbido por el BBVA.
Ameijide combatió como voluntario en la Guerra Civil. Fue
Alcalde y Presidente de la Diputación de su ciudad natal y llegó a Gobernador
Civil de Zamora y posteriormente de León.
Don Luis -o sea, el
camarada Ameijide- era conocido en los
cenáculos políticos como don Zenón porque, tras una opípara comida -las comidas solían ser siempre opíparas
cuando asistía don Luis a ellas-
preguntaba. "Y ¿a qué hora se cena aquí?". De ahí lo de don
Zenón.
Recuerdo, en mil novecientos sesenta y siete, durante el
referendo celebrado ese mismo año, que Ameijide comió en el viejo Ayuntamiento
de Toral, unas perdices en escabeche suministradas por LA CHAROLA de
Villafranca, durante cuya comida Ameijide
-.hombre dicharachero- contó
algún chiste subido de tono, bebió con prudencia y comió en abundancia y, al
final, tras limpiarse los labios, con educación, dijo: "Bien, ¿a qué hora
se cena aquí...?".
Supongo que eso mismo haría en Cacabelos, en la Fiesta de la
Cooperativa -una de las primeras fiestas
de la Cooperativa- a la que asistió,
acompañado por Carralero, enólogo, por Pepito, el de la Luz, alcalde, Alfredo,
Presidente de la Entidad y Tano Cascalllana y por todas aquellas personas que
suelen sumarse a un banquete: el cura, el Comandante del Puesto de la Guardia
Civil, la Reina de las Fiestas y algún concejal que, sin disimulos, se agregaba
a este tipo de actos, para significarse y medrar, si era posible.
Ahora mismo no sabría decir si, en esta ocasión don Luís
Ameijide dijo la consabida frase y, si, al final, asistió a la cena o si hubo
cena. No importa. Esta fotografía pertenece a ese tipo de fotografías
nostálgicas de aquellos tiempos en los que todos éramos un poco más jóvenes, un
poco más guapos y un poco más crédulos.
¡Cómo pasa el tiempo...¡. Es verdad la última frase jajajajajaj de Antonio esteban.
ResponderEliminarfelicidades por la sección que nos hace recordar a nuestro pueblo y muy bien escrito
¡ARRIBA ESPAÑA!
ResponderEliminarSi lo que dices es que España tiene que estar arriba y no abajo, vale.Si lo que dices es recordando otros tiempos, no vale
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