Piden un reconocimiento en Cacabelos para Prada

 

Prada durante los actos del 25 aniversario del Xamprada

Las últimas semanas el popular empresario cacabelense José Luis Prada –Prada A Tope- ha sido noticia por los tres premios más recientes que adornan ya sus vitrinas: Premio de la Academia de Gastronomía de Castilla y León, Premio a la trayectoria profesional “Alejandro Fernández” de los Zarcillos 2021 y Premio “Con C de Cultura” del Ayuntamiento de Carracedelo.

Vidal Pérez Herrero ha envía la carta que se reproduce íntegra a continuación al Alcalde y concejales del Ayuntamiento solicitando un reconocimiento local al, quizá, cacabelense más conocido:

Al Sr. Alcalde y a los Sres. Concejales de Cacabelos, y a todos aquellos cacabelenses que se sientan motivados por el contenido de este escrito

 

Llevo observando algún tiempo, los merecidos, sucesivos y numerosos reconocimientos institucionales de diverso ámbito, a José Luis Prada “A tope”. Entre otros, el de “Leonés del Año” en 2009. Sorprende que su pueblo, Cacabelos, no haya todavía considerado la importancia de tener entre sus hijos, a alguien con la capacidad de iniciativa y emprendimiento; con el amor, en fin, por aquello a lo que pertenece. Sería muy difícil encontrar un sentimiento de pertenencia más intenso y eficiente que el mostrado por José Luis con Cacabelos. Recuerdo los tiempos en que puso a rodar aquella pintoresca zapatería que atrajo a tantos chavales de El Bierzo, precisamente cuando acuñó su famoso sello de “A tope” y adonde empezó a comercializar sus famosas cerezas en aguardiente. Alcalde de Cacabelos –buen alcalde, a mi juicio– ha puesto de actualidad permanente y sostenible, los productos bercianos. Ha generado riqueza y trabajo, se ha preocupado de la calidad y de la homologación ecológica de los productos puestos en el mercado y ha prestigiado, haciéndolo, a su ciudad. Ha creado una gran industria de la restauración con una proyección abierta, que ha trascendido los límites de lo que pudiera haber sido razonable, y ha desarrollado una estrategia alimentaria admirable, particularmente en la producción vitivinícola. Cacabelos le debe mucho, tanto en lo que afecta a su propio bienestar como en lo que concierne a su presencia en toda España e incluso más allá de nuestras fronteras. Cacabelos debiera, creo yo, reconocerlo institucionalmente, rotulando alguna de sus calles con su nombre y nombrándole Hijo Predilecto de la ciudad. Y es muy importante que se haga en vida para que ese gesto de gratitud surta plenamente sus efectos.

Vidal Pérez Herrero