martes, 8 de marzo de 2016

Imágenes y recuerdos de Cacabelos (CC)




Antonio (Guerra) Díaz.
 Esta foto está tomada en la parte posterior de su casa que en la actualidad coincidiría con la Frutería Miruchi en la calle Ángel González.

…Y DOSCIENTAS
Por Antonio Esteban González
Doscientas fotos. Doscientas semanas. Cuatro años.
Recuerdo hoy, ahora, la primera foto y el primer texto de IMAGENES Y RECUERDOS DE CACABELOS. Era la foto de José Rodríguez, el “Andaluz”,  en el Campo de San Bartolo, así que nada mejor que celebrar nuestras ciento noventa y nueve fotos, nuestras ciento noventa y nueve semanas, nuestros casi cuatro años con nada mejor que  con la foto de otro hombre que lo dio todo por Cacabelos: don Antonio Guerra, que no es Guerra, sino Díaz.
Fue una persona inquieta  -don Antonio-  que hubiera podido ser protagonista de una película si alguien  escribiese el guion.
Dice Raúl Guerra en su “blog” que “don Antonio viajaba mucho y que, al regreso, siempre se detenía en Madrid con su gabardina sujeta por un cinturón y su sombrero de fieltro que casi nunca abandonaba”.
“Quizá  -sigue escribiendo Guerra Garrido-  fue uno de los bercianos que más veces visitó América, siempre en busca de clientes o, mejor, de amigos para publicitar sus vinos”.
Raúl Guerra escribe  “que don Antonio conoció la COCA-COLA, en botella de cadera ancha y de la que dijo que era, sencillamente, zarzaparrilla con un euforizante mezclado con soda y que servía parta combatir las resacas”.
“Ese euforizante  -aseguraba don Antonio-  procedía de la nuez de coca que contiene el doble de cafeína que el café y se completaba con hojas de la misma planta”. Y eso era todo. “Ya puedo hacer  -decía el bodeguero-  una bebida similar   -y la hizo-  que no sería un secreto para nadie y la bautizó con el nombre de COLA YORK que, desgraciadamente duró muy poco en el mercado y que significó casi el cierre de BODEGAS GUERRA porque los abogados de la marca americana  acosaron al bodeguero que intentó, en vano, defenderse, pero fue derrotado.
Raúl Guerra describe así, los últimos años de don Antonio: “ Lo recuerdo con admiración, paseando por la Plaza con su gabardina y su sombrero y conservando la dignidad que no pudieron arrebatarle los leguleyos de la COCA COLA.
Y yo añado, que, nada mejor que estas palabras para conmemorar el aniversario de IMÁGENES Y RECUERDOS DE CACABELOS, que una foto de don Antonio Díaz, más conocido por don Antonio Guerra y un texto de su pariente Raúl Guerra.

así que nada mejor que celebrar nuestras ciento noventa y nueve fotos, nuestras ciento noventa y nueve semanas, nuestros casi cuatro años con..

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