Domitila González Lago |
Siempre viví con la impresión que mi tía Domitila González
Lago (hermana de Laudina, mi madre) era una persona especial y no porque nos sintiese también afecto por el
resto de mis tías; no, es que mi tía Tila –como la llamaban sus hermanas-
ciertamente fue una mujer singular.
Al día siguiente de celebrar el pasado día 8 el Día de la
Mujer Trabajadora emprendió el último viaje en Suiza, donde residía desde hace
unos años. Y por estar tan próxima la fecha dedicada a las mujeres luchadoras
enseguida asocié a mi tía con ellas. Os cuento:
Había nacido en Quilós en diciembre de 1926, fue la quinta
de diez hermanas que muy pronto quedarían huérfanas, Domitila tenía once años.
Vivieron las diez en el Molino de la Edrada, conocido precisamente como el
Molino de las huérfanas, al cargo de las hermanas mayores: Esperanza y Concha con sy us respectivos maridos Belarmino y Toño.
Con 18 años recién cumplidos tuvo el primer gesto de
valentía, se fue a Barcelona a trabajar en una época en que las circunstancias,
y más para una mujer, no eran nada buenas. Después de cinco años en Cataluña se
decidió a marchar a América.
Domitila con Romano, su hijo |
Por segunda vez demuestra mi tía el valor que supone
emigrar, en este caso a Brasil, siendo una mujer soltera. En Brasil, después de
diversos trabajos, se dedicó a la hostelería montando un bar por su cuenta. Se
enamoró y tuvo un hijo con el que regresa a Europa para emprender una nueva
vida, ahora el destino es Suiza. El niño, Romano, queda unos años en Cacabelos
al cuidado de sus tías mientras la madre trabaja y logra mejorar su posición
económica. Y quién se lo iba a decir;
ella que procedía de una tierra de viñedos, se convirtió en viticultora en
aquel país.
Ha sido una mujer luchadora, tenaz, dispuesta a luchar y a
la vez generosa y alegre. Se adelantó a lo que muchos años después harían otras
mujeres. Hay que imaginar cómo era la vida en los pueblos en aquellos años y
tener el valor de marchar a otra ciudad primero y luego a otro continente
siendo mujer.
Graciñas
ResponderEliminarMe gusta mucho que personas como tú, se ocupen de informar a las personas que esten lejos de su tierra ''con morriña y añoranza''
Muchas gracias Carlos por dedicarle tu tiempo a mi familia, era una mujer excepcional que supo salir adelante buscando su porvenir,se quedaron huérfanas a muy temprana edad, haciéndose cargo sus hermanas Esperanza y Concha junto a sus maridos se hicieron cargó de ellas , en agradecimiento a mis tíos BELARMINO Y ESPERANZA , TOÑO Y CONCHA , POR ESA DEDICACION A SUS HERMANAS PEQUEÑAS. GRACIAS DE TODO CORAZON :-* :-* :-* :-*
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