Pedro Peñamil recibiendo una de las medallas otorgadas por el Gobierno de España |
ABC de 1950 citando a Pedro |
En Hollywood, distrito de Los Ángeles y la meca de
cine mundial, entabla amistad con conocidos personajes del cine: actores,
directores, guionistas…Muy especial fue la amistad con la mítica actriz Rita
Hayworth (La protagonista de Gilda se
llamaba Margarita Carmen Cansino y era hija de un bailarín sevillano). Fue su
confesor y confidente. Tanto le habló de las maravillas del Bierzo y de
Cacabelos que la estrella cinematográfica tuvo enorme interés en conocer esta
tierra. Había decidido conocer la patria chica de Pedro provechando una de
las visitas que él hacía a su ya anciana
madre y al resto de la familia. El rodaje de una nueva película lo impidió.
Su trabajo en pro
de la difusión de la cultura española y de lo español en general, junto
al empeño en su labor docente-recordemos que era catedrático de
Literatura-motivaron el reconocimiento del Gobierno Español al concederle
sucesivamente la Medalla al Mérito en el Trabajo de primera clase, la Cruz
distinguida de primera clase de San Raimundo de Peñafort y la Encomiendo de
Isabel la Católica; tres altas distinciones que muy pocas personalidades pueden
presumir haberlas recibido.
En el sanatorio de Alicante pocos días antes de morir |
En 1950,
aquejado de una enfermedad irreversible en aquellos años, regresa a España para ingresar en la Clínica
Rubert de Madrid. Posteriormente le trasladan a la Casa de Reposo del Perpetuo
Socorro; donde él mismo, sabiendo próxima su muerte, pide venir a morir a Cacabelos. Después de un largo y agotador viaje de más de ochocientos
kilómetros en ambulancia por las deficientes carreteras de aquellos años;
apenas tuvo tiempo para despedirse de sus seres queridos y solicitar le dejasen
solo los últimos momentos. Seis horas después de haber llegado falleció. Tenía
44 años, los mismos que vivió su santo predilecto, San Francisco de Asís. El
entierro y funeral se celebró en Cacabelos el 23 de julio de 1951 con la
participación de 42 sacerdotes.
Bajo esta lápida descansan sus restos en el cementerio de Cacabelos |
Inscripción en la lápida |
Portada de uno de sus libros |
Vos
sois el rey
De
los metales todos de la tierra
soy
el rey – dijo el Oro vanidoso,
y
el plomo airado, de su rey celoso,
le
contesta con voz que al oro aterra;
“ese
título es mío, que en la guerra
vencí
siempre tu imperio poderoso”.
Y
el bronce, que escuchaba estas razones,
a
los dos contestó:
“no
es el plomo ni el oro, sino yo
quien
impera cual rey en las naciones;
y
si no, preguntadle a mis cañones
si
hay alguien que ante si no se postró.
Vuestro
poder y fuerza neutralizo,
-dijo
humilde y sencilla la oración-
si
me pongo delante del cañón
Torno
tu plomo en brisa de granizo,
porque
mando cual reina en el que os hizo
y
sin El, no es posible la explosión.
Así
es, -dijo el Vino respetuoso,
acompañando
al Pan que le seguía-
ni
tu valor seria poderoso
sin
aquel Sacrificio Misterioso
que
se encierra entre los dos, la Eucaristía.
De ESPIRALES Y VOLUTAS
Hollywood, marzo de 1947.
Bibliografía
de Pedro Peñamil Potes:
-Mi oranxillion. Fullerton, 1934.
-Antonio y Félix. Apologética para jóvenes de ambos
sexos. Editorial Buena Prensa. México D.F. 1941.
-La Marquesa del Tricornio o Vida de Mujeres
Célebres. Editorial Mosca Hermanos. Montevideo. Uruguay, 1945.
-Espirales y volutas (poemas) Editora Acción,
Toluca, México, 1947.
-Don Justo el Imprudente. Guadalajara, Jalisco,
México, 1947.
-Corazón de acero. Editorial Studium de Cultura.
Madrid-Buenos Aires, 1949.
Nota: Agradezco a Esther y a Jesús Peñamil(http://unmardedudas.wordpress.com/)-sobrinos
de Pedro- su fundamental colaboración para poder elaborar esta entrada al
cuaderno.
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