El Cónsul saludando a César a su llegada a Bergidum |
No se podrá repetir la imagen que encabeza esta entrada: ni César viajará hasta Bergidum ni el Cónsul podrá agasajarlo como merece la primera autoridad del Imperio. Un año más –y van dos seguidos- las consecuencias del coronavirus alcanzan de nuevo a la fiesta de recreación histórica Ludus Bergidum Flavium y obligan a su suspensión.
Los responsables de la Asociación Ludus Bergidum, responsable de la organización, estiman que la prudencia aconseja esta nueva suspensión. Esperan que el próximo año se den ya las garantías sanitarias para disfrutar la fiesta con salud.
De haberse programado su celebración los días elegidos se concentraría en los días 6, 7 y 8 de agosto. Es deseo de muchos miembros y amigos de la asociación hacer la ronda esos días vestidos de romanos o astures a nivel particular, sin implicar de forma alguna a Ludus Bergidum.
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