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| El banco felizmente aparecido y el dinero recaudado |
-¡Ya lo tenemos en casa!
Entre un tono de alegría y de tranquilidad, Mundito me
comunicaba a primeras horas de la mañana la buena nueva por teléfono. El banco
robado el pasado fin de semana había aparecido y volvía a estar colocado en el
lugar del que nunca debió moverse.
Los primeros indicios de la posible recuperación llegaban la
pasado noche cuando los corazones de los culés temblaban en cada
embestida del París Saint-Germain. Un comentario en este cuaderno de Santiago
García, encargado de jardines del Ayuntamiento, ponía sobre la pista del lugar
donde había sido encontrado un banco y posteriormente llevado a un almacén.
No se sabe si el ladrón o ladrones, conmovidos por la
tristeza causada al dueño o por sentirse acorralados por los investigadores,
abandonaron el cuerpo del delito en el jardín de las estatua del Vendimiador.
Los jardineros, desconociendo quién era su dueño, se lo llevaron a la nave
donde guardan sus aparejos a la espera de su reclamación.
Mundo, como alma que lleva el diablo, se apresuró esta
mañana para acudir a identificar el objeto de su propiedad y trasladarlo a su
lugar habitual.
Un nuevo cartel colocado sobre el banco anuncia la
posibilidad de recuperar el dinero a quienes desinteresadamente aportaron su
donativo. En el mismo se contempla la posibilidad, con lo que sobre, de comprar
un GPS para adosarlo al banco y poder ser localizado en caso de un nuevo robo.
Al menos que el sentido del humor no decaiga.
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| Los dos avisos aún se pueden leer en la puerta del taller de Mundo |
Grande Mundo!!
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