jueves, 28 de diciembre de 2017

Cacabelos se declarará municipio libre de IBI




El IBI (Impuesto sobre bienes inmuebles) desaparecerá en Cacabelos. Esa es al menos la intención del grupo socialista del Ayuntamiento: rebajar ese temido impuesto a 0. Sí, como las cervezas sin alcohol, al 0’0%.

A raíz de la polémica surgida tras la exposición de las Normas Urbanísticas el pasado cinco de diciembre y la tasa estatal de 60 euros emanada de la Regulación Obligatoria de Ministerio de Hacienda y Función Pública, el Ayuntamiento ha confirmado el deseo de eliminar este impuesto para mejorar la ya de por sí devaluada economía de los cacabelenses. 

Ahora se trata de consensuar la decisión entre todos los partidos políticos presentes en el Consistorio ya que la aprobación exige una mayoría cualificada reforzada. Tarea, parece en principio, un tanto complicada por la postura que desde el inicio del presente mandato mantiene el grupo popular al negarse a votar en los plenos debido a la presencia de la actual secretaria interina de la que considera ilegal su nombramiento. Aunque ya están surgiendo voces y presiones entre los afiliados y simpatizantes del partido a favor de aceptar una votación excepcional porque la medida también lo es y, seguramente, porque ha de beneficiar a muchos de sus votantes.

Los concejales del tripartito adscritos a IU y Podemos muestran reticencias al considerar que beneficia por igual a todos los propietarios sin distinguir a los que más de los que menos tienen: no es proporcional, afirman. Por su parte, el PSOE, echando mano una vez más de la tan manida socialdemocracia, parece ser que no contemplará ningún inconveniente en generalizar la supresión de este impuesto sin hacer ascos a la buena imagen que le dará esta iniciativa de cara a las elecciones.

Es, sin duda, la mejor noticia del año para los propietarios. La desaparición del IBI supone un gran alivio para uno de los mayores dolores (económicos) de cabeza que aflijen anualmente a los dueños de viviendas, garajes, locales…y que gestionan de forma compartida la Administración del Estado y los ayuntamientos.

En Villafranca el PSOE no se ha atrevido a proponer una medida tan radical y solamente ha elevado la propuesta de una reducción de este impuesto, no la supresión como, laudate dominum, ha propuesto el de Cacabelos. No n’hi ha pebrots en la villa natal de Gil y Carrasco, que diría un catalán de la CUP a los de JxCAT.

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