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Pepe Carralero y Prada flanqueando el retrato del empresario berciano |
Los Reyes dejaron este año en el
estudio del pintor José Sánchez Carralero un regalo muy especial para José Luis
Prada, regalo que hoy llegó al Palacio de Canedo: un retrato del empresario
cacabelense.
Antes de descubrir el cuadro
entre ambos, Pepe Carralero recordó que no era le primera vez que Prada posaba para él, pues ya lo había hecho para algún cuadro de prácticas durante sus vacaciones de estudiante. Manifestó varios de los motivos que le impulsaron a
realizar esta obra. Entre estos, y en primer lugar, citó la amistad que les une
desde niños. Manifestó las numerosas
ocasiones en que Prada ha demostrado hacia él, compañeros y alumnos una
generosidad absoluta y la necesidad de rendirle homenaje por su apuesta
constante en la vida del empresario.
Afirmaba también Carralero que
para quitarse esa espina –según sus
propias palabras- se preguntaba qué podía hacer en correspondencia y encontró
la respuesta: Un retrato, un retrato de
amigo que supone un intercambio entre la personalidad de ambos y que penetra
más allá de lo que la mera imagen externa. Y en su ejecución intenté volcar mi
mayor energía, como él se merece.
Prada, que en las primeras
pruebas -según sus declaraciones- no se veía bien reflejado en el lienzo, mostró
su satisfacción por el resultado final e indicó que el cuadro ocupará un lugar
privilegiado en el comedor principal del Palacio de Canedo para disfrute de
todos los clientes.
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Descubriendo el óleo |