miércoles, 30 de octubre de 2019

Imágenes y recuerdos de Cacabelos (CCCLXXIV)



EL CARTERO NUNCA LLAMABA DOS VECES

Por Antonio Esteban

Este cartero, -oficio noble que, a veces, entrega cartas de amor y a veces de desamor-   padre de José, de Leandro, de Aníbal y de Juan, ejerció como cartero, después de la guerra de Cuba.
Este cartero nunca llamaba dos veces  -como el de la película-  a la puerta de las casas de sus vecinos porque los vecinos lo aguardaban para charlar con él y conocer las gestas de un soldado de la guerra de Cuba.
Este cartero conoció, seguramente a Eloy Gonzalo, el héroe de Cascorro que se presentó voluntario para volar un bohío desde el que los mambises asediaban a las tropas españolas y conoció también   -seguramente también-  al general Valeriano Weyler, valiente como pocos, a pesar de su estatura: un metro y cincuenta y dos centímetros.
Este cartero supo de José Martí, el poeta cubano do la Revolución que escribía sus versos, a caballo, como aquel que dice: “Yo soy un hombre sincero / de donde crece la palma / y antes de morirme quiero / echar mis versos del alma//” y que había adiestrado a sus hombres, para entrar en combate, a pecho descubierto y con el machete en la mano.
Todo esto ya es historia, pero  queremos  dejar constancia  aquí, en el blog, de una cosa: que uno de los héroes  españoles  en  Cuba  era  un  cacabelense   -hubo más-  que se llamaba José Fernández, el cartero, por antonomasia.

No hay comentarios:

Publicar un comentario