Descansando a la sombra de la ermita de San Roque |
Cualquiera que haya peregrinado alguna vez a Santiago de
Compostela seguramente la habrá experimentado en él mismo o en otros a lo largo
de las etapas que conducen a la tumba del Apóstol. Entre otras muchas de las virtudes
que ofrece el Camino, está la solidaridad.
Una pequeña siesta antes de continuar hacia Santiago |
Y ésta la hemos vista plasmada ayer en Cacabelos de forma
harto elocuente en un grupo de peregrinos italianos y españoles minusválidos
que eran ayudados por voluntarios. Si caminar con una mochila a cuestas cansa,
no será fácil imaginar el esfuerzo del grupo de apoyo en jornadas abrasadoras
como las de ayer y hoy empujando sillas de ruedas y otros artilugios mecánicos,
pero siempre con la sonrisa en los labios.
¡Qué gente y qué ejemplo!
No hay comentarios:
Publicar un comentario