martes, 24 de noviembre de 2015

Imágenes y recuerdos de Cacabelos (CLXXXVI)



UNA MUJER LLAMADA JOVITA (I)
Por Antonio Esteban González
 
Confieso  que siempre me ha llamado la atención este nombre: Jovita  y que  -no pretendo ser pedante-  procede del genitivo latino Iovis, cuyo significado es  -el de Jovita-  “el que desciende de Júpiter”.
Pero, lo que son las cosas, he buscado en donde se buscan  -y se encuentran-  hoy todas las cosas  -en Internet-  Santa Jovita y Santa Jovita no existe o, si acaso hay una pequeña mención a una santa sin importancia, si es que existen santos sin importancia. Hay San Jovita, hermano de San Faustino, mártires bajo el poder de Adriano, en Brescia.
Faustino y Jovita convirtieron  al cristianismo, de una tacada, a ciento noventa y un mil ciento noventa y ocho paganos, por lo que podrían entrar en el LIBRO GUINNESS.
¿Por qué se ha feminizado el nombre de Jovita?. Seguramente porque termina en “a”. Además parecería un contrasentido cristianar a un niño con el nombre de Jovita. (A este respecto debo decir  que en Lugo los propietarios de EL PROGRESO”, periódico con más de cien años de existencia, bautizan a los primogénitos de la familia con el nombre de Purificación y que, en la intimidad, se les conoce como Puro).
Quédese para una nueva entrega la historia de Jovita, la modista, que vivió en el Campo de san Isidro, bajo los soportales, al lado de la casa de Rodolfo y Pura y que es una historia tierna y dramática a la vez.
En las fotos que presentamos esta semana, en una escalera exterior, vemos a Gregorio, padre de Julia y abuelo de Luís Gallego; en el segundo peldaño, está el “Quesero”, Eugenia (Troitiño), y Toña, la de El “Largo”, que casó con Rafael y que fue la suegra de Varito Morete; en el tercer escalón, Jovita y, por delante, Sara Gato y Francisca la de “Polo” y abajo, Lucita, hija de Jovita, Manola y Maruja, las “Litanas”, ¬-esta última  con su hija Marisa- y, Julia, la mujer de Gregorio, con su hijo Suso  -Suso Gallego-  en brazos.
En la otra foto, de arriba abajo  y de izquierda a derecha: Lucita, hija de Jovita, Maruja, vecina de Magaz, Tita y Mary Luz y, abajo, Jovita, Gelines, nieta de Jovita, Maruja, la del Hostal, Cruz, la del “Sillero”, Floripes y Angustias, también de Magaz.
Dos fotos que nos acercan a un ayer lejano y del que aún viven algunas protagonistas.

Más información:
Jovita, la modista.
Son recuerdos de Jovita Martínez, una humilde modista de este pueblo.
Nació el 26 de Febrero de 1903. Muy jovencita se compró una máquina de coser y comenzó a trabajar. Se casó con Serafín González y emigraron a Cuba. Allí nace su hija Lucita, pero por problemas de salud pronto vuelven a España. A los pocos años fallece su esposo.

Pasa el tiempo y después de muchas dificultades se vuelve a casar con Francisco Santos, durante la Guerra Civil.

Fue una persona que supo ayudar a mucha gente. En su casa vivieron, compartieron, se refugiaron… Cuca y su hija Paquita, Fina, Hermitas, Lula y Beatriz, estas cuatro últimas hijas de maestros exiliados. Para ella eran como si fuesen de la familia.

En su taller de modista aprendieron a coser muchas chicas del pueblo y de los alrededores.

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