miércoles, 17 de septiembre de 2014

Imágenes y recuerdos de Cacabelos (CXIX)





LA VENGANZA DE DON MENDO
Antonio Esteban González 
 
LA VENGANZA DE DON MENDO es una obra de teatro de un género que los críticos han dado en llamar “astracanada” y en la que casi todo está permitido.
Esta obra, nacida a finales del siglo diecinueve es un drama muy poco serio, dividido en  cuatro actos o jornadas que no se ajusta, para nada, a las reglas de lugar, tiempo y acción, de cualquier obra de teatro.
LA VENGANZA DE DON MENDO es una parodia de un drama romántico en el que se suceden los engaños, las traiciones y los malos entendidos que hacen reír al espectador y en la que intervienen  caballeros de la Edad Media, moros, juglares, doncellas, obispos y hasta el mismo Rey.
Don Mendo es un noble arruinado que tiene amores con Magdalena, hija de don Nuño Manso que, a su vez, quiere casar a la joven con el duque de Toro.
En el acto final  -una cueva-  se produce una situación trágico-cómica en la que muere, por decirlo de una manera gráfica, hasta el apuntador. (Magdalena engaña al trovador, que se ha disfrazado de tal y es don Mendo y de quien se había enamorado, también, una mora. El Rey mata a don Nuño Manso, padre de Magdalena y así, uno tras otro, van cayendo los principales protagonistas de la historia.
La obra fue montada  por Ángel Núñez que casaría con Berta, hija de Amanda y Pedro Cotado realizó los decorados.
Se ensayó, durante un año, en la Sala de Juntas del Ayuntamiento y fue,  su representación, un éxito completo, incluso, lejos de la villa.
En la foto vemos  -de izquierda a derecha- a Tito, el de Peña; Toño, de Calzados Carballo; Mª José, hija de Turo; Gelo Núñez; Cotado; Paco, el de Carín; Manolo, el hijo del Alcalde; Berta,; Marisa Peña; Fernando, el Corino; Mari Celi; Toño Garay; Amelita Sarmiento; Olguita Guerra; Leandro, el de Noles; Pili, casada con Rivas; Luisito, el Rubio; Nandy, hija de Victorino Mauriz; César Garnelo; Quino Peña; Daniel, hijo de Mauro; Moni, la de Tajada, y creemos que el último, a la derecha, es Santos Uría.
Faltan algunos nombres que nos ha sido difícil localizar.
Esta es una foto, también, nostálgica, como otras muchas que han aparecido en el blog, y en la qu , afortunadamente, aún siguen vivas muchas personas de las que interpretaron la obra, que, repitámoslo, fue un éxito.
NOTA: ¿No sería factible que, en las Fiestas de Pascua, algunos de los intérpretes, repitieran alguna escena?
Ahí queda la pregunta…….

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