FOTO DEL
CASINO CON MOZAS
Antonio Esteban González
El Casino de
Cacabelos luce, en la foto, unas cursis cortinillas de lunares que impedían a
los curiosos -excepto a Quico, que, sí,
era “Curioso”- observar cómo las mozas -y los mozos-
se divertían sanamente porque, por aquellos años, la juventud se
divertía sanamente, sobre todo en el casino en donde se bailaban pasodobles y
valses y, alguna vez, tangos porteños mal interpretados por una orquestina
adocenada, que siempre tocaba los mismas canciones. (En esta ocasión no sabemos
qué orquesta actuaba, aunque suponemos que sería VERACRUZ con Ricardito Real a
la batería y Augusto al acordeón).
La foto,
posiblemente, fue tomada en un descanso del baile, mientras la orquesta se
refrescaba y las mozas de la foto -sin
mozos- se dejaban fotografiar. Gracias a
fotos como esta, hoy podemos hacer una historia gráfica de la villa.
De izquierda
a derecha vemos a Milagros, prima de Erundino, a una parienta de Marujina, a
Josefina, hermana de la “Nena”, a Maruja Quindós, a Aurorita, la de don
Camilo -ya fallecida- a Gelines Quindós y a Fina, la del “Danza”
que casaría, posteriormente, con Félix,
-llamado el “Heredero”- de
Villafranca.
Las niñas
que aparecen en primer término son una hija de Toñines, nieta de don Camilo y
Mary Carmen, la de Carbón, casada con José Antonio Balboa.
Y, digo yo
que, tal vez, se tratase de un baile de Carnaval porque Mary Carmen luce, en el
pelo, confetti que eran aquellos papelillos volanderos que daban color a unas
fiestas tradicionales.
Una foto,
esta, como siempre con la que tratamos de recuperar una juventud que se nos ha
ido de las manos y, lo que es más importante, la imagen de Aurorita que,
seguramente, nos estará contemplando desde una estrella lejana.
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