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| El Presidente de la Asociación entre los cuatro homenajeados: Gelita, Avelina, Luis y Antonio |
Como colofón a la 15ª Semana del Mayor organizada
por la Asociación de Jubilados y Pensionistas de Cacabelos, se celebró este
pasado mediodía una comida de convivencia para homenajear a los cuatro
asociados de más edad.
Cerca de doscientas personas se dieron cita en el
restaurante El Apóstol para acompañar a los cuatro cacabelenses que este año eran
los merecedores de los honores y el reconocimiento por parte de sus compañeros.
A la celebración se unieron familiares, amigos, Párroco, Alcalde y varios
concejales.
Los homenajeados (Ángela Méndez Fernández, Avelina
Vega Neira, Luis Lago Rivera y Antonio Sánchez Díaz) recibieron emocionados
sendas placas conmemorativas por parte de la Asociación y un regalo de recuerdo
por parte del Ayuntamiento.
La rondalla cacabelense
Tierra del Ouro puso el broche final con su repertorio de nostálgicas, algunas,
y alegres canciones que fueron coreadas también por los asistentes a lo largo
de la actuación.
Como se trata de personas con mucha marcha, desde el restaurante se dirigieron a los salones del Centro Cívico para continuar la jornada festiva en el baile organizado por la Asociación.
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| Ángela Méndez Fernàndez, Gelita |
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| Avelina Vega Neira |
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| Luis Lago Rivera |
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| Antonio Sánchez Díaz |
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Lo que hay que ver, el concejal no adscrito Carballo en animada charla con Cela, y por la pinta con muy buen rollo. ¿Habrá trasfuguismo?, que tengan mas cuidado estos del PSOE de mirar con quien se las gastan, porque por la pinta les ha salido rana el fichaje. Quien a buen árbol se arrima buena sombra le cobija, ¿se habrá "arrimado" al alcalde que lo cobija su sombra y mano derecha?, que por lo que se comenta también fue afiliado de los del PSOE durante sus primeros pasos políticos. GUAPA FOTO
ResponderEliminarjajajajajajajaja
ResponderEliminar¿Qué te pasa, sociata, que te da envidia de que ya no pintais nada en este pueblo?
Vuestros comentarios nos resbalan al 90% de los cacabelenses HONRADOS que no os hacemos ni caso.
Sólo sois cuatro amargados solitarios, ni Dios quiere estar con vosotros.
En esa comida estabais dos allí apartados en una esquina, como perros rabiosos, sin que nadie quisiese sentarse a vuestro lado.
Eso es lo que de verdad os quema.