Cacabelos ya presume de gastrobares

Zona del gastrobar en el interior de la Plaza de Abastos

Desde hace unos pocos años se han ido introduciendo en el mundo de la hostelería los ya muy populares gastrobares. Éstos son un combinación de bar y restaurante donde se intenta combinar el servicio tradicional de bebidas con una oferta de tapas específicas de cada establecimiento.

En realidad no podemos presumir aún de gastrobares, así en plural, de momento lo haremos en singular: ya tenemos un gastrobar. No competiremos aún con los instalados en el famoso   Mercado de San Miguel de Madrid, ni tan siquiera con los de la Plaza de Abastos(Plaza Gourmet) de Ponferrada, pero tiempo al tiempo. Quizá tengamos alguna sorpresa más próximamente.

Coincidiendo con las pasadas ferias de la Cruz de Mayo se inauguró en nuestra Plaza de Abastos el primer gastrobar de Cacabelos. A su responsable, Manuel Feijoo, no le gusta denominarlo así, prefiere hablar de un  espacio gastronómico. Y quizá tenga razón. Su establecimiento, abierto desde la siete de la mañana en el patio interior del edificio municipal, sobrepasa las ofertas a las que nos tienen acostumbrados este tipo de lugares.

Por supuesto que el eje central del negocio gira en torno a las bebidas y a la tapas.  Éstas varían cada día. Con preferencia por los productos de la tierra. El chef estos primeros días ha sorprendido con una creación de botillo con arroz y almejas, con la ternera guisada al mencía, con las típicas combinaciones de lacón y pimientos bercianos personalizadas por el cocinero o con los populares callos con garbanzos.

Hasta aquí sería la oferta normal, pero no olvidemos que el establecimiento se encuentra en el interior de la Plaza de Abastos rodeado de otros dedicados a la venta de alimentos. El cliente, si no son de su agrado las tapas de la casa, puede comprar en la carnicería, en la charcutería, en la pescadería, en la panadería o en la frutería próximas el producto que le apetezca y consumirlo en las instalaciones del espacio gastronómico o mandándolo preparar en su cocina.

Por cierto, aún no está bautizado. Se admiten sugerencias para hacer que los votos de los clientes decidan su nombre.