Los asistentes se preparan para recoger su plato de pulpo con cachelos |
Esta pulpada popular
organizada por la Parroquia de Cacabelos ya ha convertido por mérito propio en
uno de los eventos más destacados del verano. Si bien el número de
participantes quizá ha descendido un poco en la celebrada hoy respecto a años
anteriores(no están los tiempos para echar bombas), la cifra no ha sido nada
desdeñable.
Se trataba, como en otras ediciones, de recaudar fondos para
financiar alguna de las múltiples necesidades que tienen nuestros templos
locales. Este año los beneficios se destinarán a restaurar los retablos
barrocos de El Cristo del Camino y el de San Antonio de Padua.
Emiliana concentrada en su trabajo |
Sin lugar a dudas, además de aprovechar la ocasión
para tomar el rico pulpo que prepara desinteresadamente Emiliana, cada año son más
los asistentes que llegan a la celebración bien provistos de otros
apetitosos manjares: empanadas, pimientos asados, embutidos, tartas,
rosquillas, flanes... todo elaborado de forma tradicional. No faltaron sobre
las mesas tarros de cerezas en aguardiente y otras variedades de licores
caseros para acompañar al café que la organización también incluía
en la oferta gastronómica.
Grupos de familias y amigos fueron dando buena cuenta de todas las
viandas y disfrutaron del grato ambiente que se respiraba en el jardín. Tampoco faltó la presencia de un grupo musical para amenizar la comida y animar a bailar a todos.
Familias y amigos dispuestos a saborear los manjares de la mesa |
Miguel Ángel concentrado a pesar de la grata compañía femenina |
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