Aunque oficialmente esta feria en la actualidad sólo se celebra el
día uno de mayo, hoy el recinto ferial de ganado contaba ya con la presencia de
numerosos tratantes llegados de diferentes puntos de nuestra provincia y de otras
cercanas. Por el número de vehículos de transporte de ganado la comunidad
gallega ganaba por goleada.
Parderrubias, Escairón, Muimenta, Barbadás, Verín y otros más eran los
municipios de esa comunidad presentes desde primeras horas de la mañana. Otros
procedían de Zamora o de Ledesma(Salamanca) por citar algunos de Castilla y
León. Tampoco faltaban de la también vecina Asturias e incluso de Cantabria.
Los tratos no se hicieron esperar y ya ,a primeras horas de
la tarde, fueron muchos los que regresaron a sus lugares de origen con los
negocios hechos. Por la tarde solamente los gitanos locales continuaban a la
espera del “payo” para colocarle alguna joya.
Mañana será el día grande y, si el tiempo acompaña, sin duda
volverá a repetirse el éxito de público de otros años.
Esta feria presume, y con razón, de ser una de las más
antiguas de España. Su origen se remonta a 1291, año en que el monarca Sancho
IV concedió el privilegio al arzobispo de Santiago don Rodrigo para su
celebración en nuestro pueblo. Recordad que Cacabelos entonces pertenecía a esa archidiócesis gallega.
En el documento signado por el
monarca se autoriza su celebración durante quince días a partir del día de San
Marcos(25 de abril) incluyendo, por lo tanto, el 3 de mayo, festividad de la
Cruz de Mayo. Por comprender dichas fechas en el periodo prescrito es por lo
que las ferias llegasen a ser conocidas por Ferias de San Marcos, Ferias de la
Cruz de Mayo o, simplemente, Ferias de Mayo.
una feria que no debe extinguirse pues en su día fue una fuente de ingresos importante para la villa del Cua.
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